Todos los recién nacidos están en mayor riesgo de tener un sangrado por deficiencia de vitamina K, hasta que empiecen a comer alimentos sólidos a los a 6 meses. Por ello, en este artículo te contamos más.
La obstetra y educadora perinatal Iris Ramos, también directora de Atelier de mamá: psicoprofilaxis, talleres para mamás y niños, señala que la vitamina K es un nutriente que el cuerpo necesita para estar sano, ya que su función es realizar la coagulación de la sangre e interviene en la salud de los huesos.
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¿QUÉ PROVOCA SU DEFICIENCIA EN LOS BEBÉS?
La experta agrega que la deficiencia en los bebés lactantes tiene múltiples causas. Por ejemplo, cuando el hígado no está funcionando correctamente, no sintetiza los factores de la coagulación por alteración en sus células, porque no metaboliza la vitamina K.
Otra razón puede ser la mala absorción de la vitamina a nivel intestinal o por alguna enfermedad hemorrágica neonatal.
¿POR QUÉ LOS BEBÉS NECESITAN UNA INYECCIÓN DE VITAMINA K?
Ramos enfatiza que los bebés necesitan una inyección de vitamina K para prevenir la enfermedad hemorrágica neonatal, ya que los bebés nacen con niveles muy bajos de esta, porque no pasa la barrera placentaria y; además, la leche materna tiene pocas cantidades en su composición.
Las complicaciones por deficiencia de esta vitamina no son notorias (sangrado a nivel intestinal o cerebral) y puede poner en riesgo la vida del bebé.
Por eso, se estandarizó en la atención inmediata del recién nacido la aplicación de la vitamina K.
¿QUÉ SUCEDE CUANDO LOS BEBÉS TIENEN BAJOS NIVELES DE VITAMINA K?
La obstetra comenta que el sangrado neonatal es un cuadro que aparece entre los cinco días de vida hasta los 6 meses de vida del bebé. Recordemos que el cuerpo se encarga de formar coágulos para así detener sangrados a través de la vitamina K y, como los bebés nacen con pocas cantidades de esta vitamina, ocurre los hematomas, moretones o sangrado por el cordón umbilical del bebé.
Además, de forma no visual, podría ocurrir sangrado en órganos importantes como el cerebro, intestino, estómago entre otros, ocasionando peligro en la vida del recién nacido.
¿CUÁLES SON LOS RIESGOS?
El riesgo de la inyección de la vitamina K son los mismos de la aplicación de cualquier otra inyección, como un moretón o hinchazón en el lugar donde se aplicó la inyección o la formación de una cicatriz en el lugar de la inyección.
“En muchas mamitas causa preocupación porque ha sido asociado al riesgo de desarrollar cáncer infantil o riesgos debidos a ingredientes adicionales, pero la verdad es que actualmente ninguno de ellos ha sido comprobado por estudios científicos, por lo que esta información por el momento no es correcta”, añade.
Y LOS BENEFICIOS DE LA INYECCIÓN DE VITAMINA K
El principal beneficio de la administración de vitamina K en el recién nacido es proteger y prevenir el sangrado por deficiencia de esta vitamina, ya que sus complicaciones son peligrosas, porque puede causar una discapacidad a largo plazo e incluso la muerte.
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RECOMENDACIONES
La educadora perinatal aconseja que se debe seguir las indicaciones dadas por el médico neonatólogo o pediatra en el cuidado del recién nacido. Cualquier signo de alerta o algo fuera de lo usual en el bebé, hay que consultarlo con el o la pediatra.
Por otro lado, entender que por más que la mamá aumente su ingesta en alimentos ricos en vitamina K o suplementos de este, la leche materna aumentará su concentración de forma muy leve, y esto no es suficiente para las necesidades del organismo del bebé. Entonces, simplemente la alimentación materna debe ser saludable, no automedicarse y seguir las indicaciones del médico especialista.
